miércoles, 14 de diciembre de 2011


NUESTRO EQUIPO


Creo que todos los futboleros nos hemos preguntado más de una vez, por el origen y el tamaño del cariño que le tenemos al equipo del que somos hinchas. ¿Por qué semejante profundidad?¿Por qué semejante constancia?
¿Cómo se puede querer así a un equipo de fútbol?
¿Qué resortes del alma se ponen en juego como para que uno pueda sufrir así, gozar así, emocionarse de ese modo por una simple camiseta?
¿Existe algún otro terreno de nuestras vidas en el que amemos con semejante lealtad, con una constancia comparable?.
Muchas veces he escuchado a mis amigos, a mis conocidos, comparar el amor por el equipo con el amor que se puede sentir por una mujer. Y en comparación casi siempre el amor por una mujer sale perdiendo. No tiene la misma constancia, ni el mismo desinterés, ni la misma entrega, ni la misma disposición al sacrificio. Mil veces he escuchado el comentario yo cambié no sé cuantas veces de mujer, pero de equipo, jamás en la vida.
Si el amor por nuestro equipo, no se puede comparar por el que le profesamos a una mujer.....¿vale en cambio compararlo con el que sentimos por un padre o una madre? es un amor que damos por sentado.
Y el amor por nuestro equipo no es de esa naturaleza. Nada que ver. Nuestro amor futbolero es puro sacrificio de hecho. No se como viven los hinchas que ganan casi siempre, Madrid, Barca pero la mayoría de los mortales el amor al club nos reporta muchísimos sinsabores, derrotas, brutales desilusiones, alegrías también, pero ¿cuántas de unas y cuántas de otras? Por eso, por esa constancia inmune a las derrotas se me ocurre que el amor que sentimos por nuestro equipo se parece al que sentimos por nuestros hijos. Los que tenemos la suerte de adorarlos, por supuesto.Yo jamás he iniciado una burla futbolera por que yo no soy de ningún equipo. Yo sé que para muchos de nosotros cargar a los hinchas de otros equipos es parte del folclore. Pero no para mí. Yo sé lo que se sufre cuando te critican a tu equipo. Porque sé lo que se siente cuando alguien se queja de tus HIJOS . La ciega determinación de defenderlos más allá de razones y argumentos. Defenderlos a partir de un amor incalculable, que te viene desde lo mas profundo. Un amor del cual no das razones , porque en el fondo tampoco pedís razones a vosotros mismos para sentir de ese modo. Con tus hijos y con ese otro hijo que es tu equipo de fútbol.
No sé si está bien o mal, pero así es como funciona.
Buenas noches y saludossss cordiales. J M GARCÍA

4 comentarios:

mouriño dijo...

se pone más filosófico, SR García, que Pep.

El utillero del R.Madrid dijo...

Sr García ¿has estado esnifando algo?....no obstante tienes toda la razón, yo soy aparte del San Lorenzo madridista hasta la médula, a veces ni yo mismo me controlo. Villa lesionado, lo lamento ¡¡¡¡noooooooo!!!, verdaderamente no quiero que el avión del Barça caiga en el mar, lo juro...jejeje.

el presidente de la ponferradina dijo...

García le vi en el Toralín junto al sr Del Olmo, dos históricos de la radio.

Arrigo Sacchi dijo...

el fútbol es una pasión como el amor y por tanto irracional, no le dé más vueltas García

Hala Madrid¡¡¡¡ líderes en solitario